sábado, 30 de agosto de 2008

Historias prestadas


Hace días que no tengo ninguna historia digna de pasar al blog.

Salvo Omar que sigue parándose en el medio del patio, con su gorro abrigado, y poniéndose a cantar solo, concentradísimo, orientando su vista al cielo.

Nada nuevo. Incluso intenté entender qué es lo que cantaba Omar, varias veces, pero sin éxito. Me parecía que era algo así como O sole mio... pero no, no era. Y no quise desvirtuar la realidad.


Sin embargo, me reuní con algunas colegas que se dedican a estudios audiológicos y me contaron algunas historias que enseguida pedí prestadas para publicar:


Una de ellas hizo pasar al paciente dentro de la cabina sonoamortiguada, le dió las instrucciones para comenzar a hacerle una audiometría y, antes de ponerle los auriculares le pidió:

- Por favor, podría sacarse los lentes?

Justo en el momento de acomodar la vincha con los auriculares en la cabeza del paciente lo vió cómo, rápidamente, se sacaba los dientes.


Otra contó que cuando trabajaba en un hospital y se dedicaba a hacer potenciales evocados que es una especie de electroencefalograma pero para medir la audición a nivel central, le pidió al paciente que se recostara en la camilla y se pusiera cómodo.

Enseguida se puso a preparar el equipo con todos los electrodos. Salió del consultorio para buscar algo que le faltaba y cuando volvió lo encontró, acostado en la camilla, casi desnundo, salvo los calzoncillos que se ve, no se había animado a sacar.

9 comentarios:

Unknown dijo...

Buenisisismo el de los dientes, me moriiiiii, y el otro tb, claro le dijeron pongase comodo y el señor se lo tomo a pecho!!!!
Geniales!!!

Daniela Lucena y Gisela Laboureau dijo...

noooooooooo! jajajaja se saco los dientes!!! pobreeeee

el otro nada pudoroso! vos sabes que yo hago al reves: siempre me saco menos y los medicos me tienen que decir: eso tambien sacate...

buenisimas las hisotrias prestadas.
buen fin de semana!

Elen dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Elen dijo...

No sé quién sos, pero si se que sos una genia!!! hiciste lo que siempre quise y nunca emprendí:un anecdotario de las historias de pacientes; es verdad, es la mejor forma de enfrentar algunos días difíciles.
Me reí muchísimo y de paso me acordé de algunas historias similares que me pasaron.
Gracias por el buen rato!
Cariños de una colega

Malen dijo...

Me mori de la pena con los dientes, pero se me volvio la sonrisa con el nudista, jeje. Pero la culpa la tiene la frase, pongase comodo, ya no se puede usar, juaaaaaaa! Y no importa que sean prestadas, vale la pena el solo imaginarme a Omar cantando. Un besote grande

Anónimo dijo...

Qué buena la de los dientes!!!

Y Omar, ya es todo un personaje en este blog...

tolenti dijo...

Si, el de los dientes fue tremendo. Me muero si me pasa a mi.
Tenes razon Morke, es mejor sacarse de menos que pasar ese papelón.
Bienvenida Elen! Ya pasé a visitarte.
Malen no podes ser más buena!
Si Mariale, sabes que me pasó con Omar? Lo odiaba al principio y ahora amo su personaje en el blog.

Anónimo dijo...

Tolenti, que maravilla es este blog! No me voy a cansar de escribirtelo. Y a no desanimarse por no tenr historia propias... las prestadas nos encantan tambien!
Un beso grande

Anónimo dijo...

Jaja, al de los dientes ni hacía falta hacerle el estudio!!! marche un audífono para el!